miércoles, 22 de agosto de 2012

Reflexión desde el chiringuito (IV): Mitinposeando en la procesión de San Joaquín.





Quieren robar votos en todos los caladeros, de izquierda a derecha.... Pero hasta aquí podríamos llegar. Nadie ha osado a llegar tan lejos, ni siquiera aquellos alcaldes grises impuestos a dedo desde el Palacio del Pardo. Y ya no digo nada de los alcaldes de la democracia:  ni el Jorovive, ni Paco Olvera, ni Macías, ni Álvarez Síller, ni Julio llegaron tan lejos. Una cosa es representar al Ayuntamiento en un acto de fiestas y otro muy diferente es aprovechar hasta los foros religiosos y espirituales para deleitarnos con un discurso rallado, lleno de consignas y totalmente partidista. Basta ya, hijo de mi alma, no pega ni con cola, pon los pies en el suelo y deja de enborracharte de poder.

Todo tiene un límite, ya bastante tenemos con los plenos, con las galas del deporte, y con los cientos de variados pases de modelo que te das en los medios de comunicación públicos o subvencionados (acólitos palmeros todos), por favor ten un poco de deferencia y comienza a diferenciar entre Agrupación, mitín, Ayuntamiento e Iglesia. En una Maracena de más de 21.000 habitantes hay ciudadanos de todos los colores, de todas las creencias y es posible que puedan verse ofendidos por tu actitud. Piensa en tus votantes, es posible que no entiendan muy bien vuestra estrategia de retratarse hasta con el Ñoño.


Los fieles que acuden a este tipo de actos asisten a su fe y devoción, tú, Alcalde, aprovechas toda ocasión como si de un circo se tratase. Abusas de la confianza que la Hermandad da a cualquier representante institucional de dirigir unas palabras para hacer de un acto religioso un nuevo altavoz de tu ideología. Tras oir a algunos de los implicados entiendo que la organización carece de responsabilidad sobre los actos de terceros que de mala fe abusan, insisto, utilizando su prerrogativas para envenenar estratégicamente a nuestra ciudad. Pero no quiero perder la ocasión para lanzar una reflexión: existen medios para evitar que parte de los asistentes a estos actos se sientan incomodados e incluso ofendidos en su más profundo interior... los  que puedan tomar nota que la tomen. Hoy podría ser más crítico, pero si con éstas palabras es suficiente para que los que tienen que tomar conciencia la tomen, me quedo más que satisfecho. 

Terminando, tengamos la fiesta en paz. Los actos religiosos para los fieles, presencia institucional sí... pero sin más circos. Gracias.